El sector de la automoción pone el acento en el activo más valioso de las empresas: LAS PERSONAS

Luis Herranz Sánchez-Rubio
Director de RRHH de Grupo Huertas

El sector de la automoción, caracterizado por rápidos avances tecnológicos, cambios en los modelos de negocio y en la demanda de mercado, así como por una creciente concentración y globalización de fabricantes, se enfrenta en la actualidad a diversos retos organizativos que demandan una respuesta coordinada y colaborativa de todas sus áreas funcionales, estando llamado el Departamento de Recursos Humanos a jugar un papel principal para afrontar con éxito los desafíos actuales y las tendencias emergentes que surgen en el entorno laboral.

Ahora que tanto está en boga la IA, debemos poner el acento en las personas, en la medida en la que son el activo más valioso de una empresa, siendo su contribución y compromiso esenciales para alcanzar los objetivos organizativos.

Cuando las empresas gestionan adecuadamente su capital humano pueden alcanzar mayores niveles de productividad e innovación. Y en esto la cultura de una organización, en la que confluyen normas y valores, juega un papel crucial. Una cultura sólida, positiva y fuertemente consolidada fomenta la colaboración entre sus miembros, contribuyendo así al éxito de la empresa.

La entrada de nuevas generaciones al mercado de trabajo (como los Millennials y Generación Z), con expectativas, valores y demandas diferentes a las “tradicionales”, requiere a su vez de una adaptación de las organizaciones para poder seguir dotándose de la fuerza laboral que necesita.
A este respecto, frente a las antiguas políticas estrictamente retributivas, se debe poner el enfoque en la experiencia total de el/la empleado/a, desde su incorporación hasta su jubilación, en la medida en la que el compromiso, el bienestar y desarrollo (personal y profesional) se ha convertido en una prioridad. Aspectos como el Reconocimiento, la Formación, el Desarrollo, la Flexibilidad o el Bienestar han pasado a un primer plano, desplazando a la Retribución que ya no juega con tanta fuerza como lo hacía antaño.

El sector de la automoción, que se mueve en un entorno dinámico y altamente competitivo, no es ajeno a estas circunstancias. De hecho, asistimos en la actualidad a una preocupante escasez de mano de obra cualificada que, en determinadas posiciones, llega a ser endémica, por lo que la adquisición, desarrollo y retención de talento deviene fundamental. La respuesta a este reto debe abordarse desde 3 pilares fundamentales:
1.- Adaptación tecnológica y transformación digital: para maximizar la eficiencia y mejorar la productividad.
2.- Desarrollo profesional: ofreciendo oportunidades reales de formación, capacitación y crecimiento profesional.
3.- Ambiente de trabajo: creación de entornos de trabajo que contribuyan al bienestar emocional de lo/as empleado/as.

En Grupo Huertas somos conscientes de estas necesidades y venimos apostando decididamente por la creación de entornos laborales integradores y positivos, que conformen una propuesta global atractiva para los profesionales del sector. Es por ello que llevamos años invirtiendo en la adquisición e implementación de nuevas herramientas y sistemas de gestión digitales más eficientes; en el diseño e impartición de programas formativos específicos para la adquisición de nuevas habilidades y conocimientos, fomentando el crecimiento personal y profesional de nuestros/as empleados/as; y en la implementación de medidas organizativas que permitan compatibilizar todas las necesidades concurrentes (personales, profesionales y organizativas).

En definitiva, en un entorno laboral cada vez más competitivo y exigente, el salario emocional se presenta como un factor diferenciador clave para atraer y retener talento. Al reconocer y abordar las necesidades emocionales de lo/as empleados/a, las empresas pueden construir equipos más comprometidos, más productivos y más satisfechos, por lo que podemos concluir que el salario emocional no solo es una inversión en el capital humano, sino también en la salud y vitalidad de la propia organización.