Directivos y transformación digital

Alejandro De Zunzunegui
CEO de Ninety Days, Head de Gestión del Cambio en Programa GDP y Profesor de Executive MBA en ENAE Business School

Culminar con éxito un proceso de transformación, sea esta digital, organizacional o cultural, no es tarea fácil, y en numerosas ocasiones nos encontramos con directivos y directores que carecen de la necesaria preparación para ello.

Liderar un proceso de Transformación Digital pudiera parecer algo muy simple para lo que no hiciera falta una formación específica. Nada más lejos de una realidad que nos enseña, cada día, que hacerlo supone un enorme esfuerzo intelectual a mucha gente que no está lo suficientemente preparada. Por muy jefe que sea.
Esto exige una obligatoria reacción por parte de muchas organizaciones, que deberían centrarse en el desarrollo de programas de formación continua para todos los empleados de la misma, comenzando por aquellos directivos y directores que serán los encargados de guiar la empresa a su pretendido destino, labor para la que deben formarse a conciencia.

Porque transformar nuestra realidad y adaptarnos a un nuevo modelo de relación con nuestros clientes y usuarios aprovechando la oportunidad que nos brinda el ecosistema digital y las nuevas tecnologías emergentes, requiere mucha preparación. Por ello, la formación específica en Transformación Digital es algo a lo que tendremos que dedicar tiempo, esfuerzo y recursos suficientes. No habrá éxito sin preparar y formar a todos los elementos de la compañía. A todos, sin excepción, empezando por directores y directivos.

De ahí que sea importante que las organizaciones fomenten la continua formación de sus empleados. Una formación no tan sólo académica o teórica, que es necesaria sin duda, pero no será suficiente. Una formación que debe ser además experiencial. Y que debería ser ‘obligatoria’. 
Mucho más ahora que la Inteligencia Artificial -IA- es capaz de responder casi todas las preguntas que le hagamos y de proponer soluciones a muchos de nuestros problemas. Aprender a hacer las preguntas correctas, a plantear los problemas adecuados y a discernir sobre las diferentes soluciones propuestas es algo para lo que debemos estar preparados, y para lo que debemos formarnos. Esto no va de ‘montarse en un cohete’, va de saber manejarlo. Formación en IA, también.

Vivimos la ‘Era del Dato’. Por ello toda PYME que quiera subsistir debe acometer desde ya la formación especializada de sus directivos en ciencias de gestión del dato, para permitirles ver «el norte invisible», ese punto en el futuro al que quieren llegar sin saber muy bien dónde se encuentra. Una buena gestión del dato les permitirá poder trazar las líneas de actuación futuras en su negocio estudiando cómo personalizar las soluciones existentes para hacerlas realmente eficientes en su organización y obtener así el máximo valor posible de ellas.

Porque nadie discute que a partir de los datos podemos «pensar mejor», aprender más, generar mayor valor y riqueza. Pero necesitamos, para ello, que los datos nos digan lo que nos tienen que decir en cada momento, con un significado claro, dentro de un contexto, y en función de la necesidad de quien es destinatario de nuestra propuesta de valor. Y para eso, como para todo lo demás, es necesario estar bien preparados.

De esta manera, incluyendo en estos planes de formación a quienes dirigen o están destinados en un futuro cercano a dirigir la compañía lograremos superar el miedo que nos genera lo desconocido y que provoca la escasa implicación actual de muchos directivos, directores y mandos intermedios en procesos de Transformación Digital. Un miedo que provoca altísimos niveles de rigidez e inflexibilidad en las organizaciones y un elevadísimo grado de ‘esclerosis corporativa’ que acaba por matarlas.

Formación continua para directivos. No hay otro remedio. No debe haber excusas. El tiempo y el dinero invertido serán siempre rentables, y el retorno será alto. Porque, mi querido lector, ese curso, ese máster, ese MBA que hiciste al acabar la carrera te trajo hasta aquí. Pero la transformación constante que provocan el ecosistema digital y las nuevas tecnologías emergentes exigen de permanente actualización. Fórmate. Te animo a ello.